Un hombre de 74 años falleció en Madrid tras desarrollar fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, una enfermedad rara y grave transmitida por la picadura de una garrapata en un municipio de Toledo. El paciente ingresó en la Unidad de Aislamiento de Alto Nivel del Hospital La Paz-Carlos III el 22 de julio, donde murió días después.
La fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, endémica en regiones de África, Oriente Medio y Asia, se manifiesta inicialmente con síntomas similares a la gripe. Sin embargo, su evolución es rápida y grave, causando hemorragias internas y externas, y tiene una elevada tasa de mortalidad, que puede alcanzar hasta un 30% en ausencia de tratamiento adecuado.
La Conselleria de Sanidad activó de inmediato el protocolo para evitar la propagación del virus, tomando medidas tanto para el cuidado del paciente como para la prevención de nuevos contagios.
Aunque las garrapatas suelen afectar principalmente a los animales, también son responsables de la transmisión de diversas enfermedades en humanos. En España, se han registrado seis especies de garrapatas que pueden transmitir enfermedades como la enfermedad de Lyme, la fiebre botonosa y la anaplasmosis, entre otras. A esta lista se suman enfermedades virales como la encefalitis y la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, una de las más letales.
Desde 2013, España ha contabilizado 13 casos de fiebre hemorrágica de Crimea-Congo, de los cuales cinco han resultado en fallecimientos. Este trágico caso en Madrid subraya la importancia de la vigilancia y el control de enfermedades transmitidas por garrapatas, que continúan siendo una amenaza para la salud pública en diversas partes del mundo.