El cambio climático está provocando un aumento en la proliferación de plagas, afectando la agricultura, la salud pública y el medio ambiente. Condiciones climáticas más cálidas y húmedas favorecen el crecimiento de insectos y roedores, convirtiéndose en una amenaza para los cultivos y la seguridad alimentaria. Apinsa propone soluciones integrales para mitigar este impacto, priorizando la sostenibilidad y el control especializado de plagas.