Los roedores son animales de sangre caliente que han evolucionado para sobrevivir en una amplia gama de entornos. A pesar de que muchos de ellos prefieren temperaturas moderadas, unos pocos son capaces de tolerar el calor fuerte; un hecho que un exterminador de plagas en Barcelona conoce bien. A diferencia de los humanos, que pueden sudar para disipar el calor, estos mamíferos no tienen glándulas sudoríparas en la piel.
En general, la capacidad de los roedores para tolerar altas temperaturas depende de su especie y de su hábitat natural. Algunos ejemplares, como los ratones del desierto y los jerbos, han desarrollado adaptaciones fisiológicas y comportamentales que les permiten sobrevivir en condiciones de calor extremo. Sin embargo, otros pueden verse afectadas por el calor, sufrir estrés térmico o incluso morir si no tienen acceso a sombra o agua fresca.
Ratas y ratones dependen de otros mecanismos para regular su temperatura corporal, como la evaporación a través de la respiración y la convección del aire. Además, algunos producen orina concentrada para reducir la pérdida de agua a través de la micción.
¿Cómo afecta el estrés térmico a los roedores que no pueden tolerar altas temperaturas?
El estrés térmico puede tener graves consecuencias para las ratas y los ratones incapaces de tolerar altas temperaturas. Cuando estos animales se exponen a un calor excesivo durante un período prolongado, pueden sufrir cambios fisiológicos y de conducta que afectan negativamente su salud y bienestar.
Entre los problemas que pueden experimentar aquellos roedores que no toleran altas temperaturas se encuentran los siguientes:
- Deshidratación. Debido a que pierden agua a través de la respiración y la piel.
- Disminución en su ingesta de alimento y agua. Esto puede llevar, como consecuencia, a la pérdida de peso y a una extrema debilidad.
- Sistema inmunológico. En este caso, tales mamíferos se hacen más susceptibles a infecciones y enfermedades.
Aquellos roedores que viven en ambientes cálidos pueden ser particularmente vulnerables al estrés térmico si no tienen acceso a sombra, agua fresca y aire acondicionado. Por lo tanto, es importante que los dueños de mascotas y los criadores de animales les provean un ambiente adecuado, con medidas de enfriamiento para garantizar su bienestar.
¿Qué mecanismos utilizan ratas y ratones para regular su temperatura corporal?
Los roedores cuentan con varios mecanismos para controlar la temperatura de su organismo, especialmente en ambientes donde el calor es extremo. A continuación, se describen algunas de las opciones más comunes:
- Respiración. Ratas y ratones son capaces de regular su homeostasis al exhalar aire caliente y húmedo de sus pulmones. Este proceso se conoce como evaporación pulmonar y ayuda a reducir efectivamente la temperatura del cuerpo.
- Convección. Significa que los roedores pueden regular su temperatura corporal al exponerse al aire fresco, para que el calor se disipe. Por ejemplo, pueden descansar en áreas con corrientes de aire o moverse para crear su propia brisa.
- Evaporación. En este caso, tales animales pueden controlar su temperatura corporal al transpirar a través de las glándulas sudoríparas que se encuentran en sus patas y abdomen. Además, como ya mencionamos, algunos roedores generan orina concentrada para disminuir la eliminación de fluidos por medio de la micción.
- Comportamiento. Los roedores pueden controlar sus procesos energéticos internos a través de su conducta. Por ejemplo, tienen la capacidad de buscar áreas sombreadas en ambientes calurosos, mojarse con agua fría o enterrarse en la tierra para mantenerse frescos.
En general, las ratas y los ratones son capaces de utilizar una combinación de estos mecanismos para regular su homeostasis y mantenerse cómodos en diferentes ambientes. No obstante, algunos roedores son menos resistentes al calor que otros y pueden requerir medidas adicionales para evitar el estrés térmico.
¿Cuáles son las adaptaciones fisiológicas y de comportamiento que exhiben los ratones del desierto y los jerbos?
Los ratones del desierto y los jerbos son dos ejemplos de roedores que han desarrollado características particulares para sobrevivir en ambientes extremadamente cálidos y secos, como el desierto; donde otras especies no podrían vivir. Algunas de estas adaptaciones son:
- Metabolismo. Siendo muy eficiente, les permite producir energía con menos oxígeno y menos agua que otros roedores.
- Orina concentrada. La orina de estos roedores puede ser concentrada a voluntad, con lo cual se restringe la merma de agua expulsada durante la micción.
- Hábitos alimenticios. Estos les permiten obtener la mayor cantidad posible de agua de su comida. Por ejemplo, pueden alimentarse de semillas y plantas con un alto contenido del vital líquido o almacenar productos en sus madrigueras para consumirlos más tarde.
- Pelaje. En el caso de los ratones del desierto y los jerbos, el pelaje es más claro que el de otros roedores y les ayuda a reflejar la luz del sol y mantenerse frescos.
Los ratones del desierto y los jerbos son muy activos durante la noche y descansan durante el día, para evitar altas temperaturas. Además, excavan madrigueras subterráneas en búsqueda de ambientes frescos y húmedos.
Resumiendo, los roedores son capaces de sobrevivir en una amplia gama de entornos, incluyendo aquellos con temperaturas extremas; aunque, la mayoría puede sufrir estrés térmico y experimentar problemas fisiológicos y de conducta en ambientes muy cálidos y secos. Si tu problema es una plaga de tales animales, contacta con nosotros a la máxima brevedad posible. En Apinsa poseemos la formación y experiencia necesaria para ayudarte.
